Están prohibidos los abortos y la educación sexual, sin embargo, muchas mujeres no saben nada sobre la anticoncepción. Así es la realidad de la vida en Guatemala. Es una sociedad totalmente patriarcal, donde los derechos de las mujeres se ven restringidos. En el 2022 el Congreso de Guatemala aprobó una ley que criminaliza el aborto. Una mujer que interrumpe un embarazo intencionadamente, puede ser condenada a entre 1 y 3 años de cárcel. Un médico que practica el aborto con el consentimiento de la mujer, será condenado a entre 1 y 3 años de cárcel, y si lo hace sin su consentimiento, a entre 3 y 6 años de cárcel. Además, tendrá que pagar una multa y no podrá seguir ejerciendo su profesión.
Además, se aprobó una ley sobre la educación sexual. Establece que los colegios públicos y privados no se pueden ocupar de la educación sexual de los niños. Únicamente lo pueden hacer los padres.
Por falta de la educación sexual, las chicas no tienen información sobre los métodos anticonceptivos y se pueden quedar embarazadas. Además, el nivel de violencia sexual en las familias y en la calle es bastante elevado. En caso de un embarazo no deseado, no se puede practicar el aborto de manera legal: entonces la interrupción del embarazo es llevada a cabo por personas que carecen de la capacitación y conocimientos necesarios. Según estadísticas de la ONU, en el período entre el 2010 y el 2014 solo 1 de 4 abortos en América Latina fue seguro.
A menudo, en los países en vías de desarrollo la tasa de natalidad es bastante elevada. Con el nacimiento de los niños los ingresos se mantienen iguales, pero los gastos aumentan, por lo tanto, la comida no llega para todos. Eso hace que incremente el número de niños que pasan hambre. Existen programas de planificación familiar, destinados a brindar acceso a métodos anticonceptivos, como también a los servicios de educación y consulta. El ejemplo de Estados Unidos ha demostrado que estos programas son muy efectivos.
La educación sexual es sumamente importante, y por eso nuestro proyecto procura explicar las bases y destruir los prejuicios sobre la anticoncepción. Además, en la clínica Health & Help a las mujeres les pueden colocar una espiral intrauterina. El coste de una espiral de cobre es alrededor de 2 dólares. Y su vida útil es de 5 años. Si una mujer de 25 años empieza a usar espirales antes del clímax (que, de media, empieza a los 45 años), tan sólo necesitará 4 espirales. Esto le va a costar 10 dólares en total.
Tus aportaciones contribuyen a que las mujeres de Guatemala tengan hijos por su propia voluntad, y no por desesperación. Apoya nuestro trabajo. Puedes hacer tu donación en la página web he-he.org.
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